«Una sola cosa a la vez»

«Una sola cosa a la vez»

Aunque en mochas ocasiones lo hayas escucha y hayas asumido que es verdad, resulta que nuestra mente no puede estar en varios temas a la vez, la neurociencia nos desmonta esta idea tan pretendida.

Nuestra atención es como un foco de luz, solo puede estar fijando en un único escenario a la vez. Y cuando tenemos la sensación de atención múltiple en realidad es un cambio constante y rápido de nuestra atención focalizada, lo que los investigador@s llaman «atención dividida».

¿El resultado de estar saltando de una tarea a otra de forma constante? Pues rendimos peor, ya que le tiempo que nuestra mente pierde en cambiar de un foco a otro, y readaptarse, terminan afectando a nuestros resultados.

El camino es el aprender a centrar y focalizar nuestra atención, dejando que esta descanse entre una y otra. Rendirás más y mejor. Te volverás más eficiente y eficaz.

¿Necesitas gestionar el agobio que sientes al no saber gestionar tu tiempo de forma focalizada?

Te dejo algunas ideas para que puedas practicar la focalización o mindfullnes en tu vida diaria, aprendiendo a concentrar tu cabeza en una única tarea cada vez:

1. Practicar la atención plena en actividades diarias: Puede practicar la atención plena al realizar tareas diarias como lavar platos, caminar, cepillarse los dientes, comer, etc. Centrarse en las sensaciones del momento presente puede ayudar a aumentar la conciencia y reducir el estrés.

2. Tomar pausas conscientes: A lo largo del día, tomar algunos minutos para cerrar los ojos, respirar profundamente y centrarse en el momento presente. Estos momentos pueden ayudar a reducir el estrés y la ansiedad y aumentar la claridad mental.

3. Meditación diaria: Hacer de la meditación una práctica diaria puede ser una excelente manera de cultivar la atención plena en la vida cotidiana. Se pueden encontrar muchas aplicaciones y videos de meditación guiada en línea, o puede unirse a grupos de meditación en su comunidad.

4. Conectar con los sentidos: Tomarse un momento para conectarse con los cinco sentidos puede ayudar a aumentar la conciencia y reducir el estrés. Por ejemplo, puede concentrarse en los sonidos de la naturaleza, en el aroma del café, en la sensación del sol en la piel, etc.

5. Practicar la autocompasión: La autocompasión es una parte importante del mindfulness. Tomar un momento para ser amable y compasivo consigo mismo puede ayudar a reducir la autocrítica y la ansiedad. Puede practicar la autocompasión al hablar consigo mismo de manera amable, reconocer sus logros y recordar que es humano y está haciendo lo mejor que puede.

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